¿Preocupación por los petardos?
Me veo en la necesidad de escribir acerca de un tema, por el que muchos están preocupados en estas fechas. Se acercan las fiestas de Navidad, en las cuales no sólo hay petardos y demás estímulos sonoro de por medio, sino que mezclado hay cambios de rutinas, en muchos aspectos de la vida del perro. Debemos ser conscientes que tanto si tu perro es nuevo, porque tiene pocos meses, como si es un perro con un historial de miedo o fobia a este tipo de artefactos, unos consejos días antes a los días señalados, no van a ofrecer la solución mágica a un problema de miedos. Los miedos, hay que trabajarlos con un tiempo suficiente en el que el perro según cada caso, pueda adaptarse y mejorar su confianza. Es decir durante todo el año.
Dado que ya no nos da tiempo a realizar una habituación a este tipo de artefactos con el suficiente tiempo, deberemos proponerle un lugar seguro donde se mitifique ese sonido, como decíamos antes da igual si es un perro con historial de miedos a ello o son sus primeras experiencias. En cualquier caso deberemos ofrecer la mayor tranquilidad posible, y evitaremos en lo posible horarios o a horas en las que se enfrente directamente con los petardos con el fin de evitar que si aun no tiene miedo, se pueda desarrollar o en caso de que ya lo tenga lo pase realmente mal.
También debemos diferenciar entre los perros que se sobresaltan por un ruido concreto o lo que tienen verdadera fobia. Sobresaltarse es algo natural, forma parte del mecanismo del estrés y por lo tanto de la supervivencia. Es algo a lo que no deberíamos prestar mayor atención, aunque el petardo caiga en las cercanías del perro. En cuanto a las fobias, nos referimos a cuando las personas que conviven con el perro reconocen claramente algún tipo de reacción en sus perros como:
* Conducta de fuga,
*Se esconden,
*Tiemblan,
*Vocalizan excesiva
* Salivación excesiva
*Evacuan sus necesidades en lugares “incorrectos”
*Conductas destructivas,
*Trastornos alimentarios y demás conductas irracionales respecto a su conducta normal.

Como actuar nosotros o cual es nuestro rol:
Transmitir tranquilidad al perro. Pero con normalidad, ya que la exageración de esa calma el perro tampoco la vera como normal y se mosqueará. La clave esta en lo que pasa con nosotros, no nos da miedo porque pensamos que no pasa nada, pues síguelo pensando, para que tu perro te vea tan normal, que le transmitas esa calma.
Ser un buen referente de calma y seguridad. (esto debe transmitirse siempre ya que forma parte del buen vinculo con nuestro perro)
No forzarlo.
No castigarlo ni reñirlo, el miedo es una emoción y como tal, el no está controlando sus conductas en ese momento.
Dispondremos de un lugar seguro y lo más refugiado del ruido posible, donde pueda resguardarse si lo necesita. Ese lugar sería recomendable haberlo habituado con experiencias positivas y de calma anteriormente, como es el caso de un trasportín o habitación donde duerma, tenga experiencias positivas con juguetes interactivos, huesos masticables,… y también seria recomendable mitificar más el sonido con sonido ambiental agradable o música relajante. En el caso de los huesos o chuches en juegos interactivos, sólo funciona si no está ya alterado, si habéis conseguido bloquear la fuente de ruido para que pueda concentrarse en algo agradable, como sus juguetes o sus chuches.
Si hemos de dejar al perro en casa seguir las instrucciones del lugar seguro.
En casos muy graves, la decisión u opción puede pasar por medicar al perro, pero eso es un trabajo exclusivo del veterinario. Y como tal debes acudir a él para su consejo. Un ejemplo puede ser el Adaptil, producto creado a partir de una feromona natural que ayuda a disminuir el estrés, Flores de Bach y otros productos más específicos de farmacia veterinaria.
Y recuerda! Regalale algo a tu pequeño compañero de cuatro patas, y le harías un gran favor si ese regalo fuese una terapia para superar su fobia y su miedo.