Comunicación y entendimiento
Al carecer de estructura cerebral necesaria para el lenguaje verbal, los perros se comunican utilizando posturas corporales, señales, olores (mediante orina o secreciones producidas por diferentes glándulas). Estudiando la posición corporal (la utilizan para distancias cortas) se puede saber que se están diciendo. Aunque en ocasiones se ladran, la comunicación entre los perros suele ser no vocal con cambios de posición de las orejas, cola y cuerpo. Estos cambios indican estados de humor y sentimientos y son utilizados por otros perros para predecir comportamientos futuros. Para aprender este lenguaje corporal observe que hace su perro cuando se encuentra con otro.
Las señales de calma son gestos y lenguaje corporal que realiza el perro, para hacer saber que esa situación le incomoda. Como señala Turid Rugaas en su libro “ el lenguaje de los perros”[1], los perros, “utilizan los signos para calmarse ellos mismos cuando se sienten estresados o inseguros, para trasmitir calma, y hacer que los otros perros implicados se sientan mas seguros, y perciban las señales de buenas intenciones que se dan. Se utilizan para hacer amistad con otros perros y con la gente.” Ahora bien, ¿cómo distinguimos esas señales de calma?, para distinguirlas primero tenemos que saber cuales son ya que son patrones comunes en todos los perros.

Muchos problemas de conducta tienen su origen en fallos de comunicación entre el perro y el propietario. Y otros muchos se generan porque cuando un perro está estresado no emite ni recibe las señales de calma.
Cuando hay señales de calma es que un punto de estrés pero con la suerte de que aún las reconoce y las utiliza. Kendal Shepherd, etólogo y especialista en agresión, dice que lo primero son las señales de calma si esas no se entienden, se ignoran o son castigadas, pasan a señales de amenaza (hablando se solucionan los problemas). En el caso de que esas señales de amenaza no se entiendan, se ignoren, o se castiguen nuevamente, el perro, muy a su pesar, pasará a morder porque no tiene otra opción.


La comunicación auditiva
Los sonidos, se utilizan para comunicarse a mayores distancias que el lenguaje corporal. Los más habituales son los ladridos, el aullido y los gruñidos, pero también lloriquear, gemir, etc. Los ladridos suelen mostrar estados de alerta y de excitación, tanto positiva (alegría) como negativa (ansiedad, miedo), así como también buscar atenciones por parte de otros individuos. El aullido suele relacionarse con la separación del grupo. Los gruñidos, suelen darse ante la imposibilidad de hacerse entender mediante las señales de alerta (señales de calma), e indican su incomodidad hacia alguna situación. Aunque también en algunas ocasiones se dan durante el juego. La diferencia reside en las tonalidades y la actitud no amenazante, ni tensa que muestra el perro en la situación.
La comunicación olfativa
El olfato canino es especialmente fino, y les permite recibir señales emitidas por otros individuos con gran precisión. Esta comunicación tiene una ventaja muy importante y es que se mantiene en el tiempo. La orina es uno de los medios para transmitir esa información acerca del sexo, el estado reproductivo, incluso, parece que del estatus del animal. Además de la orina, otro medio es la secreción procedente de las glándulas perianales o mamarias, ya que como la orina son ricas en feromonas.

Desde Makia te aconsejamos observar a nuestros perros, con el fin no sólo de mejorar su estabilidad emocional y calidad de vida, sino también la nuestra, ya que entenderlo nos hará las cosas mucho más fáciles ya que al fin y al cabo, compartimos vivencias y convivimos juntos.
[1] Rugaas, T. (2005). El lenguaje de los perros: las señales de calma.